En el estado de Puebla más de 190 mil niños son explotados laboralmente por un familiar, lo que dificulta que las autoridades puedan sancionar a los responsables.
Al respecto, el titular de la la Secretaría de Competitividad, Trabajo y Desarrollo Económico (Secotrade) Jaime Oropeza Casas informó que de acuerdo a las propias cifras del INEGI, los menores explotados no son en la calle, sino en sus hogares o incluso en negocios familiares.
Lo que ha complicado la realización de operativos de parte de la dependencia estatal para su apoyo y sancionar a los padres por utilizar a sus hijos o parientes para un trabajo extenuante.
El funcionario estatal sostuvo que de acuerdo al último censo del INEGI, se establece que 7 de cada 10 niños trabajan para un familiar, ya sea en negocios o en el hogar, lo que dificulta que la secretaría pueda realizar inspecciones, para aplicar sanciones.
Sin embargo se realizan revisiones aleatorias, con la intención de ratificar que exista explotación infantil en las empresas.
Pidió a la ciudadanía a denunciar al 911 y proporcionar cualquier tipo de información que conozca que se lleva a cabo este tipo de prácticas, que están fuera de la ley.